La esperanza de vida en España es de las más altas del mundo y va en aumento. De hecho, en la actualidad, cerca del 20% de la población tiene 65 años o más y se espera que para el año 2050 el porcentaje sea superior al 30 %.
No obstante, aunque el estado de salud y la calidad de vida sean buenos, con la edad se pierden facultades y es normal necesitar ayuda para hacer ciertas tareas de la vida cotidiana. Por ello, cada vez es más frecuente contratar a un cuidador, lo que ha hecho que se multiplique el número de empresas que ofrecen servicios de cuidados domiciliarios para personas mayores.
En esas circunstancias, es normal que surjan ciertas dudas: ¿Cómo se busca un cuidador?, ¿qué tareas se le pueden encargar?, ¿qué hay que hacer para contratarle?, ¿cuánto cobra?
10 distintivos de calidad de una empresa
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado un estudio sobre este tipo de negocios: se ha dirigido por teléfono a 125 empresas repartidas en nueve ciudades y les ha pedido información detallada. Como resultado, la organización ha elaborado un decálogo para saber si una empresa es de calidad y no hay banderas rojas a la vista:
1. "Los cuidadores son profesionales, con formación especializada y buenas referencias en caso de tener experiencia previa".
La empresa debe tener una bolsa de cuidadores formados para atender a personas mayores y no solo para hacer las labores domésticas. Aparte de la formación, las referencias de haber atendido anteriormente a otras personas con cariño y responsabilidad también son importantes.
2. "Hay más de un candidato y se les puede conocer previamente".
La mayoría de las empresas incluyen los mismos servicios: ayuda para aseo personal, preparar comidas, salir a dar un paseo o hacer un recado, limpiar la casa... En general, permiten conocer al cuidador y cambiarlo o sustituirlo, pero conviene asegurarse de ello antes de contratar.
3. "Existe un periodo de prueba para ver cómo se desenvuelven la persona mayor y el cuidador y si hay afinidad personal".
El mayor y el cuidador suelen tener una relación muy estrecha, por lo que resulta fundamental que haya un buen entendimiento entre ambos.
4. "El cuidador es sustituido en caso de falta de entendimiento o por ausencias en vacaciones o bajas".
Algunas empresas tienen limitado el número de sustituciones y otras no, por lo que es conveniente dejar claras estas cuestiones antes de nada.
5. "La empresa se interesa por el desarrollo del servicio y establece un protocolo claro para valorarlo a través de llamadas periódicas a la familia o visitas al domicilio".
6. "Los cuidadores de nacionalidad extranjera tienen los papeles en regla".
Desde la OCU avisan de que, aunque pueda parecer algo obvio a priori, no sería la primera vez que un cliente descubre que el cuidador contratado a través de una empresa no está en situación legal.
7. "La empresa no pone impedimentos en mostrar el contrato del empleado y el pago de la cotización mensual a la Seguridad Social".
Es otra de las comprobaciones que recomiendan realizar antes de contratar un cuidador.
8."El presupuesto está detallado, de manera que el cliente puede saber a cuánto ascienden los gastos que la empresa cobra por la gestión, además del salario y la cuota de la Seguridad Social del cuidador."
No todas las empresas son igual de transparentes en cuanto a los importes que cobran; de hecho, pocas lo son. Aconsejan pedir un presupuesto desglosado.
9. "La empresa tiene un teléfono u otro medio de contacto ágil para imprevistos".
Además, es fundamental asegurarse de cuándo está disponible, de qué forma y cuánto suelen tardar en responder.
10. "La empresa tiene concierto para operar como SAD (Servicio de Ayuda a Domicilio)".
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