Hasta llegar a este punto, en el que Europa ya tiene previsto prohibir los gasolina y diésel en 2035, la misma normativa europea ha ido presionando a los fabricantes de automóviles para hacer sus motores más limpios. Y los diésel contaminan hoy muchísimo menos que hace solo unos años. Pero siguen siendo contaminantes. Sin embargo, un ingeniero francés ha inventado un sistema que es capaz de hacer que un motor diésel sea tan poco contaminante como un coche eléctrico. Un invento súper innovador que no solo es válido para coches diésel, sino también para camiones, barcos y generadores.
El invento de este ingeniero francés, que se llama Laurent Geulin, es una caja que se conecta directamente al sistema de escape de los vehículos con motores diésel y que retiene el dióxido de carbono y las partículas finas que salen por el escape. Se denomina ‘Compact Carbon Catcher’, y su proceso ya ha sido validado por un agente judicial. Es decir, que no es un prototipo experimental con una funcionalidad dudosa o limitada, sino que ya se ha podido comprobar que es eficaz y efectivo reduciendo las emisiones contaminantes de los coches con motor diésel de manera completa. De hecho, consigue que un vehículo con motor diésel solo emita oxígeno y agua, de una forma parecida a como lo haría un vehículo de pila de combustible.
Este invento podría salvar al motor diésel haciendo que contamine lo mismo que un coche eléctrico
Esta podría ser la solución para salvar los motores diésel, pero según ha contado el mismo Laurent Geulin, quien ha inventado esta tecnología, está encontrando problemas con los fabricantes. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que la mayoría de ellos ya han parado sus inversiones en el desarrollo de los motores diésel y han concentrado sus inversiones en toda la tecnología que hay detrás de los coches eléctricos. Es decir, que es posible que este invento, que es capaz de conseguir que un coche diésel contamine tan poco como un coche eléctrico, haya llegado tarde como para poder tener una oportunidad en el mercado de los turismos.
Pero sigue habiendo una vía posible para el Compact Carbon Catcher. El transporte de mercancía por carretera va a llevar un proceso de descarbonización mucho más lento que el de los turismo, y su inventor asegura que es una tecnología perfectamente compatible con los camiones. Así que podría ser una solución para reducir la contaminación que producen los camiones de gran tonelaje, y dentro del mercado de los turismos esta tecnología podría permitir extender la vida útil de los coches diésel más allá de los plazos que tiene ahora previstos Europa.
En realidad, este no es el primer invento que hemos podido conocer que captura todos los agentes contaminantes que expulsa un coche con motor diésel por su sistema de escape. Sin embargo, sí parece ser uno de los más eficaces. Este tipo de inventos suelen ser grandes cajas con filtros de partículas que contienen y almacenan el dióxido de carbono y otras partículas contaminantes. Pero ¿y después? Habría que tener previsto también una cadena de recogida y reciclaje en la que podrían participar otras industrias, porque este dióxido de carbono se puede utilizar para fabricar ciertos productos, por ejemplo.
Sea como fuere, este ‘Compact Carbon Catcher’ es una interesante tecnología que parece una simple caja conectada al tubo de escape de un coche diésel, pero que tiene toda la tecnología necesaria en su interior para impedir que expulse dióxido de carbono y partículas finas. Lo que consigue es que un coche con este sistema conectado a su escape solo emita oxígeno y agua.
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