Últimamente se está viendo la quema de la bandera europea en algún país vecino. Eso de formar parte de una comunidad como la europea podría haber sido realmente muy positivo para todos, digo podría porque los resultados se alejan mucho de esa realidad.
Los que ya tenemos una edad todavía seguimos haciendo mentalmente el cambio del euro a la peseta, en realidad la echamos de menos. La entrada en la comunidad hace unos 38 años, y unos años más tarde del euro, no ha hecho otra cosa que provocar un estancamiento, por no decir un retroceso a todos los niveles, al menos por lo que a España respecta y, parece ser que no somos los únicos.
Si el sistema corrupto solo hubiera sido de los gobiernos de cada país y desde Bruselas los responsables de poner orden hubieran sido honrados, probablemente las cosas habrían ido de otra manera, pero esa maldita corrupción es una metástasis política incurable que afecta a todos y a todos los niveles, y así nos ha ido.
Todos recordamos con cierto pesar el redondeo cuando entró el maldito euro, que un café pasaba de 100 pesetas, a 166 (1€), aplicado en una gran parte de productos y que nos lo tuvimos que comer con patatas sin que nadie mediara para evitarlo.
El poder adquisitivo por mucho que nos quieran vender a través de los medios, ha sufrido un brutal y paulatino descenso y, en contrapartida los salarios han incrementado en cuentagotas, provocando un triste aumento de la pobreza en la población. Años atrás, con un sueldo vivía una familia y se podía permitir ciertos lujos; hoy, con dos sueldos no se llega a fin de mes.
Que se quiera acabar con el sector primario, el dinero físico, imponer las ciudades de 15 min y una cartilla sanitaria bajo el control de la OMS, entre otros, responde a un sometimiento de gobernantes locales a la élite mundial con el fin de establecer un gobierno global que nos convertirá en esclavos a su merced, y el hecho de pertenecer a la UE es obvio que les facilita las cosas, no hay otro objetivo, porque resulta bastante lamentable que tengamos que estar bajo las ordenes de quienes solo tienen intereses económicos en los cargos que ocupan.
Si a nuestros políticos les importamos una mierda, imagínate a los que están en Bruselas.
No olvides que el objetivo de todos ellos no es velar por tus intereses, ni por tu bienestar, ni siquiera por tu salud, su objetivo siempre ha sido resolver su futuro y el de sus familias, si todavía no lo tienes claro, entonces es que formas parte de ese rebaño que intentan controlar.
La unión europea ha sido, es, y seguirá siendo un fraude, como la OMS, el banco europeo, la OTAN y otras muchas instituciones que te venden como humanitarias y son nidos de corruptos y ladrones.
Estaría bien que alguien con la suficiente capacidad pudiera realizar un estudio sobre la evolución económica y social de los europeos en estos años, seguramente si conociésemos los resultados, a todos nos faltarían piernas para salir corriendo de esta farsa.
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