domingo, 3 de diciembre de 2023

CICLISTAS: ESA GRAN PESADILLA

Lamento si alguna de mis amistades o contactos se da por aludida por el hecho de formar parte de ese pequeño 10% que comentaré a continuación, pero esa minoría no es óbice para que exprese lo que siento al haber podido experimentar en primera persona la falta de civismo, educación y respeto por parte de la gran mayoría de ciclistas.

Se suelen quejar de los adelantamientos por parte de ciertos conductores al no respetar la distancia mínima de seguridad, probablemente esos que tanto se quejan son los que forman parte de ese 90 % de irresponsables, solo un 10 % de los que me he encontrado, se mantenían en fila de a dos y lo más alejados posible de la calzada.

Hoy viniendo de Barcelona, al disponer de tiempo y quizá también por un poco de nostalgia, he tenido la "brillante idea" de hacerlo por "las costas". Craso error, un absoluto caos, no docenas, sino cientos de ciclistas "paseando" por esa carretera, desde Castelldefels hasta Sitges.

Una auténtica invasión, donde esa falta de educación vial, civismo y respeto han hecho gala durante todo el trayecto, salvo contadas excepciones, todos formando grupos de 4, 5, hasta 10 o 12, con la dificultad de adelantamiento que ello implica. Esa carretera como todos sabemos carece de arcén y cuenta con infinidad de curvas, por lo que los adelantamientos comportan un elevado riesgo, tanto para ellos, como para los vehículos, de un sentido y otro. Si los grupos fuesen solo de dos y en fila india, permitirían adelantamientos con menor riesgo, al tratarse de grupos tan numerosos y, en algunos casos ocupando todo el carril, provoca una grave situación, inicialmente de estrés para los conductores, que acaban adelantando en zonas de nula visibilidad (la mayoría de ellos). El taxi que iba delante mío, en uno de los adelantamientos a uno de los grupos, al incorporarse se ha encontrado por sorpresa con otro grupo, obligándole a seguir invadiendo el carril contrario, con la fortuna de que el que venía de frente ha podido parar, los dos detenidos por sorpresa en medio de la carretera, los que veníamos detrás frenando bruscamente, con riesgo de impacto por alcance para el resto, al final todo ha quedado en un susto, motivo por el cual el taxista ha optado por no seguir jugando a la ruleta rusa y nos hemos tenido que tragar el resto de trayecto a 20 Km/h, para que los señoritos de las bicis disfrutaran de su ruta, a pesar de que no pagan matriculación, impuesto de circulación ni seguro, toda la carretera para ellos, los conductores que se jodan. ¡¡¡BRAVO!!!

En definitiva, que si se te ocurre optar por ese trayecto en fin de semana, ármate de paciencia o ve andando, igual llegas antes. 

Y esos ciclistas, parece mentira que la mayoría sean también conductores y no tengan el mínimo respeto cuando están montados en esa máquina del demonio, como si al subirse en ella sufrieran una alteración del sentido de la velocidad, el espacio, el respeto a los demás usuarios de la vía y a la par, una pérdida del sentido común.

1 comentario:

  1. Toda la razón, si quieres que te respeten, aprendes a respetar,
    Y por desgracia no lo hacen
    Saludos

    ResponderEliminar